El 1 de octubre de 2024 comenzó un proyecto que investiga biomarcadores de migraña y usa tecnología LLM para personalizar tratamientos y mejorar la calidad de vida de los pacientes.
El 1 de octubre de 2024 dio inicio un innovador proyecto de investigación centrado en los biomarcadores fisiológicos y funcionales relacionados con los episodios de migraña. El objetivo principal es analizar la correlación entre estos biomarcadores y el desarrollo de tratamientos preventivos que reduzcan la intensidad y frecuencia de los ataques. Además, el proyecto incorporará tecnología de Modelos de Lenguaje de Gran Escala (LLM, por sus siglas en inglés) para ofrecer recomendaciones personalizadas basadas en la literatura científica actualizada, ayudando a los pacientes a gestionar mejor su calidad de vida diaria.
En el proyecto HI-Iberia va a colaborar con la Universidad de Ginebra para investigar cómo los biomarcadores fisiológicos y funcionales pueden predecir y prevenir los episodios de migraña. Estos biomarcadores son claves para entender los mecanismos biológicos que provocan los ataques, lo que podría llevar a tratamientos más efectivos y específicos.
Además, se empleará tecnología LLM para analizar grandes volúmenes de datos, correlacionando los biomarcadores con la literatura científica más reciente. El uso de estos modelos permitirá generar recomendaciones informadas para los pacientes, ayudándolos a gestionar mejor sus condiciones diarias, optimizando su calidad de vida y brindando información precisa para el tratamiento preventivo.
El proyecto busca transformar el tratamiento de las migrañas, no solo reduciendo la frecuencia y severidad de los episodios, sino también ofrecer herramientas tecnológicas que permitan una gestión más autónoma y precisa por parte de los pacientes. El uso de LLM podría hacer que las recomendaciones de tratamiento sean más adaptativas y personalizadas, lo que resultaría en una mejor calidad de vida para quienes padecen migrañas.
Este proyecto promete ofrecer un enfoque multifacético en la lucha contra las migrañas, combinando la investigación biomédica con avances tecnológicos. Su éxito, no solo mejorará los tratamientos preventivos, sino que también proporcionará a los pacientes un control más informado y efectivo sobre su bienestar.